Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) informaron este martes que han iniciado operaciones terrestres «limitadas» contra objetivos del grupo chiita libanés Hezbolá, en la zona fronteriza del sur del Líbano. Esta acción marca un nuevo capítulo en la creciente tensión en la región, con ambos bandos intensificando sus actividades militares.
Operaciones basadas en inteligencia precisa
De acuerdo con un comunicado emitido por las FDI, estas incursiones están respaldadas por información de inteligencia precisa y se han enfocado en «objetivos e infraestructuras terroristas» de Hezbolá. Las fuerzas israelíes indicaron que estos ataques se llevan a cabo en aldeas cercanas a la frontera libanesa y se justifican bajo la premisa de eliminar amenazas «inmediatas» para las comunidades del norte de Israel.
«Las FDI han iniciado incursiones terrestres limitadas, localizadas y selectivas, basadas en inteligencia precisa», afirmaron las autoridades israelíes. «Estos objetivos representan una amenaza directa para la población israelí».
La operación, bautizada como «Flechas del Norte», es parte de un plan metódico diseñado por el Estado Mayor israelí y el Comando Norte, y ha sido cuidadosamente preparado durante meses. El objetivo es neutralizar la infraestructura militar de Hezbolá en el sur del Líbano y contener la amenaza que este grupo armado representa para Israel.
Acciones simultáneas en Gaza y otros frentes
La operación en el Líbano coincide con el conflicto en Gaza, donde Israel continúa sus esfuerzos militares. Las FDI señalaron que la estrategia en ambos frentes sigue una evaluación constante de la situación: «La operación continuará conforme a la evaluación de la situación y en paralelo a los combates en Gaza y otros escenarios».
Esta ofensiva terrestre es parte de la respuesta de Israel a los ataques recientes de Hezbolá en la frontera. Hezbolá, por su parte, ha afirmado haber lanzado ataques contra posiciones israelíes en las localidades de Adaisseh y Kfar Kila, situadas en el sur del Líbano. Según el grupo chiita, estos ataques lograron impactos directos en las tropas israelíes desplegadas en la zona.
Escalada militar en el Líbano
La noche del lunes, diversas localidades del distrito de Marjayoun, en la gobernación de Nabatiye, fueron blanco de la artillería israelí. Posteriormente, la aviación israelí atacó Dahiyeh, un suburbio al sur de Beirut. Medios locales hebreos reportaron que el gabinete de seguridad israelí ha aprobado una posible fase más agresiva de la guerra contra Hezbolá, que incluye una invasión terrestre en el Líbano.
De acuerdo con The Times of Israel, las FDI habrían emitido advertencias a los civiles para evacuar tres ubicaciones controladas por Hezbolá en los suburbios del sur de Beirut. Esto refuerza la expectativa de una intensificación del conflicto, en el que ambas partes parecen prepararse para una escalada significativa en las hostilidades.
Crisis humanitaria en el Líbano
El conflicto ha desatado una crisis humanitaria en el Líbano. Según un informe reciente de Naciones Unidas, más de un millón de personas han sido desplazadas debido a los bombardeos israelíes. La situación es particularmente grave en el sur del país, donde las comunidades se ven obligadas a huir ante la creciente amenaza de una invasión a gran escala.
Filippo Grandi, alto comisionado de la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR), señaló que unos 100.000 libaneses han cruzado la frontera hacia Siria en los últimos días, y advirtió que el flujo de refugiados continúa. «El sufrimiento de estas personas, especialmente mujeres y niños, es incalculable», declaró Grandi en un mensaje publicado en X (anteriormente Twitter).
La situación en los cruces fronterizos con Siria es crítica, con más del 60% de los desplazados siendo niños, de acuerdo con la Media Luna Roja Siria. Las condiciones en las que estas familias intentan escapar del conflicto son extremadamente difíciles, lo que agrava aún más la situación humanitaria en la región.
Impacto en el sistema sanitario libanés
A la crisis humanitaria se suma el impacto devastador en el sistema de salud del Líbano. La Organización Mundial de la Salud (OMS) informó que entre el 17 y el 28 de septiembre, 11 trabajadores sanitarios han muerto y 10 más han resultado heridos debido a los ataques. Además, 37 centros de salud han cerrado sus puertas, y tres hospitales han sido evacuados. «Muchos de los trabajadores sanitarios también han sido desplazados, especialmente en las regiones del sur, Bekaa y el sur de Beirut», detalló la OMS.
Las implicaciones de este conflicto no solo afectan la seguridad y estabilidad de la región, sino también la capacidad del Líbano para atender a su población más vulnerable en medio de una crisis sanitaria.
Conclusiones y panorama
La situación en el sur del Líbano sigue siendo crítica, con una creciente preocupación internacional sobre una posible intensificación del conflicto. Tanto Israel como Hezbolá mantienen una postura firme, lo que sugiere que los enfrentamientos podrían extenderse en las próximas semanas. Mientras tanto, miles de civiles continúan sufriendo las consecuencias de una guerra que ya ha desplazado a millones de personas y devastado infraestructuras vitales.
El mundo observa con preocupación, mientras organismos internacionales, como la ONU y la OMS, hacen un llamado urgente para proteger a los civiles y mitigar el impacto humanitario del conflicto.
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