El nuevo Hospital General de Pachuca que se clausuró por las malas condiciones de la construcción pocos días después de su inauguración, se mantendrá inoperante durante todo 2023, adelantó la secretaria de Salud de Hidalgo, Zorayda Robles Barrera, debido a que no se ha recibido por parte de la dependencia estatal.
Al respecto, la funcionaria estatal señaló que se prevé una inversión adicional superior a los 500 millones de pesos para subsanar errores y faltantes en el nosocomio, en el que destacó las correcciones mayores en la planta tratadora de aguas residuales, en garantizar el abasto de agua potable, ya que de momento no cuenta con este servicio; drenaje, del cual no solo carece el inmueble sino la región del municipio de San Agustín Tlaxiaca; entre otras intervenciones.
“Se requiere de apoyo del gobierno federal para echar a andar este proyecto; no hay recursos, lo más probable es que se haga el próximo año. No quiero ser imprudente al dar una fecha estimada porque si lo hacemos vamos a caer en un error, pero sí es poco factible que se haga este año”, aseveró.
De igual manera, Robles Barrera refirió que la conclusión de los trabajos en el último piso del nuevo Hospital General de Pachuca, el cual se mantiene inconcluso, se contempla dentro de la estimación de 500 millones de pesos; sin embargo, añadió que el equipamiento del mismo se considera un rubro aparte, toda vez que el equipo se cotiza en dólares, cuyo valor fluctúa constantemente, lo cual significa un cambio en el costo y por ello la inversión final será mayor, precisó.
La titular de la SSH aseguró la coordinación con la Secretaría de Infraestructura Pública y Desarrollo Urbano Sustentable para verificar en qué proceso va la revisión y ejecución de obras ante tales correcciones; además de mantener los trabajos con autoridades competentes como la Contraloría y Procuraduría General de Justicia de Hidalgo para el desarrollo de indagatorias y fincar o deslindar responsabilidades de ex funcionarios.
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